Es un monumento de excepcional interés artístico, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1919 y propiedad del Ayuntamiento de Granada desde 1990. Está ubicado en la Plaza de los Campos nº 6, en el ángulo que conforma la plaza con la Cuesta de Aixa, en pleno corazón del actual Realejo.
Fue un hermoso palacio nazarí construido, durante el reinado de Muhammad II (1273-1302), sobre uno de los torreones de la muralla del barrio de Alfareros. Situado entre almunias (huertas o fincas) reales, perteneció a la Huerta Grande de la Almanxarra en pleno corazón del Realejo. Destaca por ser el único testimonio de almunia real que se ha conservado intramuros a la antigua ciudad nazarí. La relevancia de este palacio reside en su condición de construcción pre-alhámbrica, en ser el antecedente directo de las soluciones arquitectónicas y decorativas plasmadas en los palacios de la Alhambra.
Del palacio o residencia real tan solo se conserva el torreón adosado a la muralla, cuyo interior encierra una qubba o salón de recepciones. Esta qubba estuvo precedida por un portico de entrada de cinco arcos y con un papallon a cada lado y una alberca. A continuación se disponía una alberca octogonal sobre un jardín de planta rectangular con anden central.
Su interior encierra una sala cuadrada de 7 metros de lado, cuyo arco de entrada tiene zócalo vidriado de alicatados, con la inscripción: "Dios es único" en caracteres cúficos enlazados con vastagos versos del Corán en torno.
En los frentes de la sala se abren tres balcones, el central con arco de colgadura, rodeando el aposento un zócalo de sencillos entrelazados.
Detalle del arco de la puerta principal.
Detalle del suelo de unas de las alcobas.
El techo de vigas de madera.
Detalle de restos de azulejo en la pared de la otra alcoba.
Dispone también de una sala de proyecciones.
El edificio que actualmente cobija la qubba dispone de una sala de exposiciones y otra de usos múltiples, convirtiendo el monumento nazarí en un espacio cultural donde disfrutar durante todo el año de una programación de actividades de lo mas variada.
Sabías que ...
Que el Cuarto Real de Santo Domingo servía a los Reyes musulmanes para recogerse en él los días del Ramadán.
Actualmente la exposición temporal que hay es: «Vida en el Cuarto Real». Del artista granadino: Juan Vida, del 11 de mayo al 30 de septiembre de 2015.
En la próxima entrada hablaremos de esta exposición y de la biografía de este pintor granadino.
En la próxima entrada hablaremos de esta exposición y de la biografía de este pintor granadino.
Desde los ventanales se pueden apreciar los rectos arqueológicos en los patios exteriores.
Desde la parte superior se puede apreciar la entrada a la qubba y al fondo restos arqueológicos subterráneos.
Las ventanas desde el interior.
las ventanas desde el exterior.
Con un cristal de protección podemos observar los muros originales.
Todavía tienen que adecuar al menos una zona como esta, de mas restos arqueológicos.
Detalle del grabado de una de las puertas de madera.
Parte del suelo original sobre el muro.
Un gran trabajo sin duda de restauración.
A la izquierda la ubicación exacta donde se encontraba el plato de la fuente, y a la derecha la ubicación actual del plato original, que lo han colocado junto a la alberca.
Como en todo palacio morisco, un plato interior con un caudal empalmaba con una fuente mayor en el exterior de la vivienda.
Amplios jardines.
En este espacio cuando este el césped mas fuerte será el espacio donde se ubicará el público, estando el escenario al fondo, para múltiples usos.
Los cipreses con su altura aíslan el recinto de los edificios cercanos.
Entrada principal al edificio y se puede apreciar la qubba al fondo.
Mucho colorido a pesar de la fecha y el calor.
En el centro de los jardines hay un estanque con una fuente en el centro.
Que el Cuarto Real de Santo Domingo servía a los Reyes musulmanes para recogerse en él los días del Ramadán.
Que perteneció a las reinas moras, de las que lo compraron los Reyes Católicos, que lo cedieron al Convento de Santa Cruz y, desde s XIX, fue propiedad particular. En el año 1990 el Ayuntamiento de Granada lo compró e inició su restauración.
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